Me acaban de dar la noticia del fallecimiento de Manuel Castillo. Desde aquí quiero dar el pésame a los amigos y familiares. No me salen más palabras.
Un saludo
NECROLÓGICA: fallece D. Manuel Castillo
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illanes1942
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Siempre recordaré una conversación de varios minutos con él acerca de su música, incluso acerca de su marcha procesional que se ha grabado en el último disco de la Banda Municipal de Sevilla.
Los consejos musicales que me dió los he tenido desde entonces muy presentes. Jamás podré estar lo suficientemente agradecido por los inmerecidos aprecios que hizo de algunas de mis modestas composiciones.
Descanse en Paz.
Los consejos musicales que me dió los he tenido desde entonces muy presentes. Jamás podré estar lo suficientemente agradecido por los inmerecidos aprecios que hizo de algunas de mis modestas composiciones.
Descanse en Paz.
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consolacion_patrona
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- Registrado: 20 Nov 2006, 22:42
El compositor Manuel Castillo Navarro, Premio Nacional de Música en 1959, ha muerto hoy a los 75 años en su domicilio de Sevilla.
Este compositor de "reconocido prestigio internacional", fue distinguido Premio Nacional de Música en 1959 y nombrado Hijo Predilecto de Andalucía en 1988, en reconocimiento a su gran trayectoria profesional y a su aportación al mundo de la música en el ámbito nacional e internacional.
El alcalde de la ciudad lamentó su pérdida y recordó "su compromiso con Sevilla a lo largo de sus muchos años de trayectoria profesional; es sin ninguna duda, el compositor que mejor versión supo realizar del Himno de Andalucía".
Castillo Navarro fue director del Conservatorio Superior de Música que lleva su nombre, y maestro de directores de música como Juan Luis Pérez, Francisco Javier Gutiérrez o Miguel Sánchez.
El mundo de la música, ha sabido reconocer a lo largo de los años su contribución a través de sus grandes sinfonías y conciertos de piano y violonchelo y, así, hace meses la Orquesta Sinfónica de Sevilla le rindió un "cálido homenaje" en su 75 cumpleaños.
El Ayuntamiento de Sevilla recordará su figura y en su nombre, la Banda Municipal rendirá homenaje en su sepelio a Manuel Castillo Navarro, "maestro de prestigiosos músicos de Andalucía".
Espero también que el Conservatorio Superior de Música "Manuel Castillo" le rinda su merecido homenaje, por ejemplo ahora en Santa Cecilia. Para mí se lo merece, era un grandísimo compositor que tocó casi todos los géneros. Yo como Cantor y Presidente del Coro Manuel de Falla de dicho Conservatorio Superior de Sevilla he cantado varias de sus obras, y me uno también al resto de foreros.
DESCANSE EN PAZ
Este compositor de "reconocido prestigio internacional", fue distinguido Premio Nacional de Música en 1959 y nombrado Hijo Predilecto de Andalucía en 1988, en reconocimiento a su gran trayectoria profesional y a su aportación al mundo de la música en el ámbito nacional e internacional.
El alcalde de la ciudad lamentó su pérdida y recordó "su compromiso con Sevilla a lo largo de sus muchos años de trayectoria profesional; es sin ninguna duda, el compositor que mejor versión supo realizar del Himno de Andalucía".
Castillo Navarro fue director del Conservatorio Superior de Música que lleva su nombre, y maestro de directores de música como Juan Luis Pérez, Francisco Javier Gutiérrez o Miguel Sánchez.
El mundo de la música, ha sabido reconocer a lo largo de los años su contribución a través de sus grandes sinfonías y conciertos de piano y violonchelo y, así, hace meses la Orquesta Sinfónica de Sevilla le rindió un "cálido homenaje" en su 75 cumpleaños.
El Ayuntamiento de Sevilla recordará su figura y en su nombre, la Banda Municipal rendirá homenaje en su sepelio a Manuel Castillo Navarro, "maestro de prestigiosos músicos de Andalucía".
Espero también que el Conservatorio Superior de Música "Manuel Castillo" le rinda su merecido homenaje, por ejemplo ahora en Santa Cecilia. Para mí se lo merece, era un grandísimo compositor que tocó casi todos los géneros. Yo como Cantor y Presidente del Coro Manuel de Falla de dicho Conservatorio Superior de Sevilla he cantado varias de sus obras, y me uno también al resto de foreros.
DESCANSE EN PAZ
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fiscal_palio
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Ha fallecido Manuel Castillo
Muere a los 75 años Manuel Castillo, músico sevillano y universal
El músico, ganador del Premio Guerrero y dos veces galardonado con el Nacional de Música, permanecía recluido en su casa, víctima de una depresión desde hacía años
Ayer por la mañana fue encontrado el cuerpo sin vida de Manuel Castillo, uno de los mayores músicos sevillanos del siglo XX, en su casa sevillana de Los Remedios. El cadáver fue encontrado por una de sus sobrinas, que entró en la vivienda acompañada de su hijo con unas llaves de la casa. Sus diez sobrinos (Castillo no tenía hijos y sus cuatro hermanos ya habían fallecido) estaban extrañados por no tener noticias de él desde hacía días, después de numerosas visitas infructuosas a su domicilio y llamadas sin respuesta.
Tras hallar el cadáver, su sobrina avisó a la policía, que constató la muerte del compositor y avisó al juez de guardia y al médico forense. Según las primeras apreciaciones de éste, comunicadas «in situ» a la familia, el fallecimiento debió producirse hace unos cuatro días. El cuerpo fue trasladado durante la tarde de ayer al Instituto Anatómico Forense, donde hoy por la mañana se le practicará la autopsia que revelará las causas de su muerte.
Según fuentes de la familia consultadas ayer por ABC, el compositor padecía una fuerte depresión desde hacía casi 10 años, y fue, al parecer, esta enfermedad la que le hizo permanecer en su domicilio y abandonar progresivamente sus amistades e incluso el contacto con buena parte de sus familiares. «Todos queríamos ayudarle pero no se dejaba, quería estar solo», comentaba ayer uno de ellos, muy afectado, y «así murió». La muerte de su última hermana, ocurrida el 22 de junio de 2004, agravó su depresión y su deseo de aislamiento, circunstancia que provocó que su fallecimiento no fuera conocido hasta varios después de producirse. A ninguno de los dos últimos homenajes que recibió en su ciudad natal asistió: ni al concierto de clausura del curso universitario 2004/05 con motivo del V Centenario de la creación de la Hispalense que tuvo lugar el 1 de junio; ni al celebrado en el Teatro Central el pasado 16 de marzo en homenaje a Cristobal Halffter, Luis de Pablo y al propio Castillo por su 75 cumpleaños. Málaga le dedicó en 2004 su prestigioso ciclo de música contemporánea, pero tampoco asistió al mismo.
Fuentes familiares confirmaron a ABC que el próximo jueves a las 11 horas se celebrará una misa en su memoria en la Iglesia de los Remedios. Los detalles del entierro no se conocerán hasta después de que se practique la autopsia, tras lo cual se trasladará su cuerpo al tanatorio de San Jerónimo.
Una vida para la música
Manuel Castillo había nacido en Sevilla el 8 de febrero de 1930. Curso estudios en el conservatorio de la ciudad con Antonio Pantion y Norberto Almandoz. Posteriormente se trasladó a Madrid donde estudió con Antonio Lucas Moreno y Conrado del Campo.
En 1953 se trasladó a París para estudiar piano y composición con Lazaré Levy y Nadie Boulanger, regresando a España para ser profesor de Historia y Estética en el Conservatorio hispalense. En 1956 obtiene la cátedra de piano y en 1958 estrena el Primer Concierto para piano y orquesta con la Sinfónica de Madrid. Ingresó en el Seminario donde profesó como sacerdote, y fue nombrado coadjutor de la Parroquia de Omniun Santorum, aunque años más tarde abandonó esta actividad.
El reconocimiento oficial le llega en 1959 con el Premio Nacional de Música, que vuelve a obtener en 1990, siendo uno de los pocos músicos que ha sido galardonado en dos ocasiones.En 1962 fue nombrado Académico de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría, y desde 1964 al 78 director del Conservatorio Superior de Música de Sevilla.
Realiza su Primera Sinfonía por encargo de Radio Televisión Española en 1969, y en el 70 estrena su obra «Antígonas de Pasión», a la que sigue en 1972 la Sonata para piano.
Tras conseguir la Beca Reina Sofía , estrena en el 77 su Tercer Concierto para piano y orquesta en el Festival de Granada, y con motivo de su cincuenta cumpleaños, Radio Nacional de España organiza un concierto en Madrid para el que Castillo compone, «Tempus para piano».
En el año 1982 recibió el premio Cristóbal Halffter a la mejor obra para órgano y poco después la Camerata de Salzburgo estrena «Cuatro cuadros de Murillo». Y en el Festival de Música de Granada se estrena en el año 86 su obra «Cinco Sonetos lorquianos», que posteriormente en 1993 grabó la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla dentro de la colección de «Documentos Sonoros», creada por el Centro de Documentación Musical de Andalucía.
El catálogo de la obra de Manuel Castillo es amplísimo: obras para piano, vocal, orquesta, música de cámara, música aplicada...
La música de la Expo y la Ross
En 1988 se le encarga la composición de la música oficial de la Exposición Universal del 92, y recibe ese mismo año, el Premio Andalucía de la Música y es nombrado Hijo Predilecto de Andalucía.
En 1990 se producen dos hechos importantes que denotan la versatilidad del músico. Por un lado, la Orquesta y Coro Nacional de España celebra un concierto monográfico de la obra de Castillo al cumplir el músico sesenta años, y para ello éste compone la obra «Danzarina en la catedral. Escena coreográfica para piano y conjunto instrumental». Ese mismo año realiza también un concierto para guitarra y orquesta que se estrena en la Bienal de Flamenco de Sevilla. También es nombrado académico de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.
La participación de Manuel Castillo en la creación de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla fue fundamental, aunque, eso sí, en silencio. Su relación con la Orquesta siempre fue estrecha y ésta le encarga la Segunda Sinfonía que estrena en 1992.
En 1993 recibe tres importantes encargos. Por un lado, con motivo del centenario de Sevillana de Electricidad la empresa encarga a Castillo una obra, que también estrena la Ross. Se trata de «Poemas de luz». Ese mismo año Focus encarga también al músico una obra para órgano y Castillo escribe «Retablo de los Venerables», que estrena el organista José Enrique Ayarra, intérprete que ha estrenado la casi totalidad de la obra para órgano del músico desaparecido. Y, finalmente, estrena en el Auditorio Nacional, por encargo de la Orquesta y Coro Nacional de España, «Variaciones sobre un tema de Mompou».
Medalla de Oro de Bellas Artes, que le es entregada por el Rey en 1994, al año siguiente recibe lo que se denomina el «Cervantes de la Música», el Premio Guerrero, otorgado según consta, «por su aportación relevante y significativa al enriquecimiento de nuestro patrimonio musical». Con motivo del cincuenta aniversario de la muerte de Falla compone «Sinfonieta, que es estrenada en Granada en 1996. La ciudad que le vio nacer le reconoce como Hijo Predilecto en 1987 y por encargo del Cabildo Catedral realiza la obra «Concierto Sacro Hispalense», que se estrena al año siguiente con motivo de los actos conmemorativos del 800 aniversario de la Giralda, siendo ésta su última obra.
Desde esta fecha sus apariciones son cada vez más esporádicas y apenas asiste a los conciertos ni de la Sinfónica ni tampoco de Juventudes Musicales, institución de la que era co-fundador.
Sobre su obra el también músico y compositor Tomás Marco ha dicho que «Castillo es un compositor sevillano, sin dejar de ser andaluz, andaluz sin dejar de estar presente en la mejor música de España, español sin dejar de proyectarse en lo universal». Para algunos autores es el mejor compositor para música de órgano de la segunda mitad del siglo XX.
(Fuente ABC de Sevilla)
En el plano de la música procesional, nos legó "Reina de la Paz", una magnífica composición que la Banda Municipal de Sevilla ha rescatado y grabado en el disco que próximamente saldrá al mercado. Descanse en Paz.
Muere a los 75 años Manuel Castillo, músico sevillano y universal
El músico, ganador del Premio Guerrero y dos veces galardonado con el Nacional de Música, permanecía recluido en su casa, víctima de una depresión desde hacía años
Ayer por la mañana fue encontrado el cuerpo sin vida de Manuel Castillo, uno de los mayores músicos sevillanos del siglo XX, en su casa sevillana de Los Remedios. El cadáver fue encontrado por una de sus sobrinas, que entró en la vivienda acompañada de su hijo con unas llaves de la casa. Sus diez sobrinos (Castillo no tenía hijos y sus cuatro hermanos ya habían fallecido) estaban extrañados por no tener noticias de él desde hacía días, después de numerosas visitas infructuosas a su domicilio y llamadas sin respuesta.
Tras hallar el cadáver, su sobrina avisó a la policía, que constató la muerte del compositor y avisó al juez de guardia y al médico forense. Según las primeras apreciaciones de éste, comunicadas «in situ» a la familia, el fallecimiento debió producirse hace unos cuatro días. El cuerpo fue trasladado durante la tarde de ayer al Instituto Anatómico Forense, donde hoy por la mañana se le practicará la autopsia que revelará las causas de su muerte.
Según fuentes de la familia consultadas ayer por ABC, el compositor padecía una fuerte depresión desde hacía casi 10 años, y fue, al parecer, esta enfermedad la que le hizo permanecer en su domicilio y abandonar progresivamente sus amistades e incluso el contacto con buena parte de sus familiares. «Todos queríamos ayudarle pero no se dejaba, quería estar solo», comentaba ayer uno de ellos, muy afectado, y «así murió». La muerte de su última hermana, ocurrida el 22 de junio de 2004, agravó su depresión y su deseo de aislamiento, circunstancia que provocó que su fallecimiento no fuera conocido hasta varios después de producirse. A ninguno de los dos últimos homenajes que recibió en su ciudad natal asistió: ni al concierto de clausura del curso universitario 2004/05 con motivo del V Centenario de la creación de la Hispalense que tuvo lugar el 1 de junio; ni al celebrado en el Teatro Central el pasado 16 de marzo en homenaje a Cristobal Halffter, Luis de Pablo y al propio Castillo por su 75 cumpleaños. Málaga le dedicó en 2004 su prestigioso ciclo de música contemporánea, pero tampoco asistió al mismo.
Fuentes familiares confirmaron a ABC que el próximo jueves a las 11 horas se celebrará una misa en su memoria en la Iglesia de los Remedios. Los detalles del entierro no se conocerán hasta después de que se practique la autopsia, tras lo cual se trasladará su cuerpo al tanatorio de San Jerónimo.
Una vida para la música
Manuel Castillo había nacido en Sevilla el 8 de febrero de 1930. Curso estudios en el conservatorio de la ciudad con Antonio Pantion y Norberto Almandoz. Posteriormente se trasladó a Madrid donde estudió con Antonio Lucas Moreno y Conrado del Campo.
En 1953 se trasladó a París para estudiar piano y composición con Lazaré Levy y Nadie Boulanger, regresando a España para ser profesor de Historia y Estética en el Conservatorio hispalense. En 1956 obtiene la cátedra de piano y en 1958 estrena el Primer Concierto para piano y orquesta con la Sinfónica de Madrid. Ingresó en el Seminario donde profesó como sacerdote, y fue nombrado coadjutor de la Parroquia de Omniun Santorum, aunque años más tarde abandonó esta actividad.
El reconocimiento oficial le llega en 1959 con el Premio Nacional de Música, que vuelve a obtener en 1990, siendo uno de los pocos músicos que ha sido galardonado en dos ocasiones.En 1962 fue nombrado Académico de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría, y desde 1964 al 78 director del Conservatorio Superior de Música de Sevilla.
Realiza su Primera Sinfonía por encargo de Radio Televisión Española en 1969, y en el 70 estrena su obra «Antígonas de Pasión», a la que sigue en 1972 la Sonata para piano.
Tras conseguir la Beca Reina Sofía , estrena en el 77 su Tercer Concierto para piano y orquesta en el Festival de Granada, y con motivo de su cincuenta cumpleaños, Radio Nacional de España organiza un concierto en Madrid para el que Castillo compone, «Tempus para piano».
En el año 1982 recibió el premio Cristóbal Halffter a la mejor obra para órgano y poco después la Camerata de Salzburgo estrena «Cuatro cuadros de Murillo». Y en el Festival de Música de Granada se estrena en el año 86 su obra «Cinco Sonetos lorquianos», que posteriormente en 1993 grabó la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla dentro de la colección de «Documentos Sonoros», creada por el Centro de Documentación Musical de Andalucía.
El catálogo de la obra de Manuel Castillo es amplísimo: obras para piano, vocal, orquesta, música de cámara, música aplicada...
La música de la Expo y la Ross
En 1988 se le encarga la composición de la música oficial de la Exposición Universal del 92, y recibe ese mismo año, el Premio Andalucía de la Música y es nombrado Hijo Predilecto de Andalucía.
En 1990 se producen dos hechos importantes que denotan la versatilidad del músico. Por un lado, la Orquesta y Coro Nacional de España celebra un concierto monográfico de la obra de Castillo al cumplir el músico sesenta años, y para ello éste compone la obra «Danzarina en la catedral. Escena coreográfica para piano y conjunto instrumental». Ese mismo año realiza también un concierto para guitarra y orquesta que se estrena en la Bienal de Flamenco de Sevilla. También es nombrado académico de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.
La participación de Manuel Castillo en la creación de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla fue fundamental, aunque, eso sí, en silencio. Su relación con la Orquesta siempre fue estrecha y ésta le encarga la Segunda Sinfonía que estrena en 1992.
En 1993 recibe tres importantes encargos. Por un lado, con motivo del centenario de Sevillana de Electricidad la empresa encarga a Castillo una obra, que también estrena la Ross. Se trata de «Poemas de luz». Ese mismo año Focus encarga también al músico una obra para órgano y Castillo escribe «Retablo de los Venerables», que estrena el organista José Enrique Ayarra, intérprete que ha estrenado la casi totalidad de la obra para órgano del músico desaparecido. Y, finalmente, estrena en el Auditorio Nacional, por encargo de la Orquesta y Coro Nacional de España, «Variaciones sobre un tema de Mompou».
Medalla de Oro de Bellas Artes, que le es entregada por el Rey en 1994, al año siguiente recibe lo que se denomina el «Cervantes de la Música», el Premio Guerrero, otorgado según consta, «por su aportación relevante y significativa al enriquecimiento de nuestro patrimonio musical». Con motivo del cincuenta aniversario de la muerte de Falla compone «Sinfonieta, que es estrenada en Granada en 1996. La ciudad que le vio nacer le reconoce como Hijo Predilecto en 1987 y por encargo del Cabildo Catedral realiza la obra «Concierto Sacro Hispalense», que se estrena al año siguiente con motivo de los actos conmemorativos del 800 aniversario de la Giralda, siendo ésta su última obra.
Desde esta fecha sus apariciones son cada vez más esporádicas y apenas asiste a los conciertos ni de la Sinfónica ni tampoco de Juventudes Musicales, institución de la que era co-fundador.
Sobre su obra el también músico y compositor Tomás Marco ha dicho que «Castillo es un compositor sevillano, sin dejar de ser andaluz, andaluz sin dejar de estar presente en la mejor música de España, español sin dejar de proyectarse en lo universal». Para algunos autores es el mejor compositor para música de órgano de la segunda mitad del siglo XX.
(Fuente ABC de Sevilla)
En el plano de la música procesional, nos legó "Reina de la Paz", una magnífica composición que la Banda Municipal de Sevilla ha rescatado y grabado en el disco que próximamente saldrá al mercado. Descanse en Paz.
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Ventimiglia
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Farfano
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02/11/2005 - Homenaje de la Banda Sinfónica Municipal al maestro Manuel Castillo.
http://www.artesacro.org/noticia.asp?idreg=7876
Arte Sacro. La Banda Sinfónica Municipal de Sevilla acudirá mañana jueves, 3 de noviembre, a las 12.00 horas, al cementerio de San Fernando para rendir homenaje al maestro Manuel Castillo.
Dirigida por Francisco Javier Gutiérrez, la Banda interpretará la marcha fúnebre compuesta por el maestre Castillo en 1980 'Reina de la Paz'. Los músicos cambiarán su tradicional corbata carmesí por una negra en señal de luto.
http://www.artesacro.org/noticia.asp?idreg=7876
Arte Sacro. La Banda Sinfónica Municipal de Sevilla acudirá mañana jueves, 3 de noviembre, a las 12.00 horas, al cementerio de San Fernando para rendir homenaje al maestro Manuel Castillo.
Dirigida por Francisco Javier Gutiérrez, la Banda interpretará la marcha fúnebre compuesta por el maestre Castillo en 1980 'Reina de la Paz'. Los músicos cambiarán su tradicional corbata carmesí por una negra en señal de luto.
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clavesol
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Os dejo la necrológica del prestigioso musicólogo cordobés y director del Conservatorio Superior de Música de Córdoba, Juan Miguel Moreno Calderón, publicada en el Diario Córdoba el pasado domingo.
La semana que termina nos deja el triste recuerdo de la muerte en Sevilla de Manuel Castillo, el compositor andaluz más importante tras la desaparición de Joaquín Turina, también sevillano, hace ya más de medio siglo. Con setenta y cinco años de edad, todos los reconocimientos y distinciones imaginables en España, una pléyade de discípulos diseminados por todas partes y pertenecientes a varias generaciones musicales, y un sinfín de personas que le querían, se nos fue este músico grande de España.
Aunque, en realidad, se empezara a ir, sin hacer ruido, hace ya algunos años, cuando, cada vez más ensimismado y enfermo de melancolía, se fuese encerrando y aislando de toda clase de vida social e incluso artística. Ese hombre bueno que fue, extraordinariamente sensible, de fina inteligencia y pulcra discreción, tenía el afecto de cuantos le conocieron o trataron en algún momento de sus vidas, y, sobre todo, gozaba de la admiración que, invariablemente, le profesaban propios y extraños.
En efecto, se le quería, se le admiraba y se le respetaba, aun sin que él hubiese puesto nunca empeño alguno en que fuese así; pero, precisamente, por la sencillez y bondad que envolvían su genio, era imposible no sucumbir al encanto de don Manuel.
Como a la autenticidad y grandeza de su música, honda, exquisita, sensitiva. Fiel reflejo de la personalidad humana del artista.
Nacido en Sevilla en 1930, a ella entregó lo mejor de sí mismo, que era su persona y su talento, su enorme talento musical. Porque, aunque en su juventud viviera algunos años de formación en Madrid, y luego en París, y siempre, entonces y después, tuviese abiertas las puertas del mundo académico y musical de la Villa y Corte, lo cierto es que Manuel Castillo prefirió su Sevilla natal.
Eligió vivir, enseñar y crear allí. Aun a sabiendas de que, para su proyección como compositor, fuera mejor buscar la centralidad que recogía a todos en esa época de la vida musical española. Pero no le importó. Como tampoco le importó ir por libre, estéticamente hablando, cuando sus compañeros de generación (la inmensa mayoría, al menos) se afanaban por abrazar la vanguardia más radical en los años sesenta y setenta, antes de que los retornos de algunos, les hicieran encontrarse de nuevo en el camino de una modernidad pensada, sosegada y no excluyente necesariamente de la tradición.
La que Castillo siempre practicó y la que otorga homogeneidad y un inconfundible sello personal a la totalidad de su obra, dentro de la lógica y natural evolución y maduración de su lenguaje. Quizás por eso, todos le respetaron, aunque, bien es verdad, que no todos entendieran en todo momento la coherencia personal y estética de este músico irrepetible.
Un eximio creador, por encima de todo (es decir, del excelente pianista y venerado maestro que fue), a quien no cabe duda de que la historia musical española le tiene reservado ya un lugar de honor.
La semana que termina nos deja el triste recuerdo de la muerte en Sevilla de Manuel Castillo, el compositor andaluz más importante tras la desaparición de Joaquín Turina, también sevillano, hace ya más de medio siglo. Con setenta y cinco años de edad, todos los reconocimientos y distinciones imaginables en España, una pléyade de discípulos diseminados por todas partes y pertenecientes a varias generaciones musicales, y un sinfín de personas que le querían, se nos fue este músico grande de España.
Aunque, en realidad, se empezara a ir, sin hacer ruido, hace ya algunos años, cuando, cada vez más ensimismado y enfermo de melancolía, se fuese encerrando y aislando de toda clase de vida social e incluso artística. Ese hombre bueno que fue, extraordinariamente sensible, de fina inteligencia y pulcra discreción, tenía el afecto de cuantos le conocieron o trataron en algún momento de sus vidas, y, sobre todo, gozaba de la admiración que, invariablemente, le profesaban propios y extraños.
En efecto, se le quería, se le admiraba y se le respetaba, aun sin que él hubiese puesto nunca empeño alguno en que fuese así; pero, precisamente, por la sencillez y bondad que envolvían su genio, era imposible no sucumbir al encanto de don Manuel.
Como a la autenticidad y grandeza de su música, honda, exquisita, sensitiva. Fiel reflejo de la personalidad humana del artista.
Nacido en Sevilla en 1930, a ella entregó lo mejor de sí mismo, que era su persona y su talento, su enorme talento musical. Porque, aunque en su juventud viviera algunos años de formación en Madrid, y luego en París, y siempre, entonces y después, tuviese abiertas las puertas del mundo académico y musical de la Villa y Corte, lo cierto es que Manuel Castillo prefirió su Sevilla natal.
Eligió vivir, enseñar y crear allí. Aun a sabiendas de que, para su proyección como compositor, fuera mejor buscar la centralidad que recogía a todos en esa época de la vida musical española. Pero no le importó. Como tampoco le importó ir por libre, estéticamente hablando, cuando sus compañeros de generación (la inmensa mayoría, al menos) se afanaban por abrazar la vanguardia más radical en los años sesenta y setenta, antes de que los retornos de algunos, les hicieran encontrarse de nuevo en el camino de una modernidad pensada, sosegada y no excluyente necesariamente de la tradición.
La que Castillo siempre practicó y la que otorga homogeneidad y un inconfundible sello personal a la totalidad de su obra, dentro de la lógica y natural evolución y maduración de su lenguaje. Quizás por eso, todos le respetaron, aunque, bien es verdad, que no todos entendieran en todo momento la coherencia personal y estética de este músico irrepetible.
Un eximio creador, por encima de todo (es decir, del excelente pianista y venerado maestro que fue), a quien no cabe duda de que la historia musical española le tiene reservado ya un lugar de honor.
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Farfano
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El compañero "consolacion_patrona" nos informa de lo siguiente:
Mañana día 12 de noviembre en la Parroquia de San Lorenzo Mártir de Sevilla, tendrá lugar la Santa Eucaristía por el descanso eterno de D. Manuel Castillo Navarro, prestigioso músico sevillano, ganador del Premio Guerrero y dos veces galardonado con el Nacional de Música.
Participará el Coro "Manuel de Falla" del Conservatorio Superior de Música Manuel Castillo de Sevilla, dirigido por su su Director-Fundador, el Catedrático D. Ricardo Rodríguez Palacios.
Decir también que participará la Orquesta del Conservatorio y un organista.
Es la Misa que el centro que lleva su nombre le rinde.
Mañana día 12 de noviembre en la Parroquia de San Lorenzo Mártir de Sevilla, tendrá lugar la Santa Eucaristía por el descanso eterno de D. Manuel Castillo Navarro, prestigioso músico sevillano, ganador del Premio Guerrero y dos veces galardonado con el Nacional de Música.
Participará el Coro "Manuel de Falla" del Conservatorio Superior de Música Manuel Castillo de Sevilla, dirigido por su su Director-Fundador, el Catedrático D. Ricardo Rodríguez Palacios.
Decir también que participará la Orquesta del Conservatorio y un organista.
Es la Misa que el centro que lleva su nombre le rinde.
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