Misericordia... ¡Señor! fue compuesta en 1948 por quien fuera el director y alma mater del periodo más fructífero de la banda Municipal de Córdoba. Don Dámaso Torres García (1904-1984), que junto a Pedro Gámez formaban la élite musical de la Córdoba de la época, y la ambición por despertar a la ciudad de Córdoba a la cultura, y sobre todo a la música.
La marcha, que se estrenó con el nombre de “Misericordia”, posteriormente se amplió hasta el de “Misericordia,... ¡Señor!”, cuando el propio autor realiza una revisión de la instrumentación de la obra, cambiando hacia la plantilla moderna con la que la banda municipal de Córdoba funcionará desde su reestructuración en los años 50, cuando además le añade los últimos dos compases de la marcha, que hacen que acabe de forma más conclusiva, y sobre todo con un efecto más sobrecogedor.
Gran admirador de Richard Wagner, la marcha posee claras influencias de éste, no en vano, el día de su estreno, en el Cinema Liceo de Córdoba, el día Domingo 14 de Marzo de 1948, en la segunda parte del concierto, dedicada específicamente a la Semana Santa (La primera estaba dedicada a la zarzuela), se interpetaron además la marcha fúnebre de “El Ocaso de los Dioses” y la obertura de “Rienzi”, del autor alemán.
Asimismo la marcha posee efectos de vanguardia musical, poco utilizados ó escuchados en marchas de procesión.
La crónica aparecida el martes posterior al estreno de “Misericordia” (los lunes no había periódico, solo información deportiva) versaba de esta forma: “Constituyó un éxito la interpretación de una magnífica e inspiradísima marcha religiosa genuinamente andaluza, obra original del Maestro Dámaso Torres la que, ante los insistentes aplausos del público que abarrotaba el local, hubo que repetir.
La marcha incluye una Saeta, en la voz del fliscorno (y luego clarinete pral. y primeros) que podemos encontrar en la parte central, y corresponde a lo que se conoce como “Saeta Vieja de Córdoba”, no a una saeta de tipo flamenco.
Grabada por la banda Municipal de Córdoba en el año 1980, en el salón de los mosaicos del alcázar de los Reyes Cristianos, con sonido en directo, editada por la Obra Cultural del Monte de Piedad y Caja de ahorros de Córdoba, en la primera de las dos famosísimas cintas de la banda Municipal.
probablemente desde esa ocasión no ha vuelto a ser interpretada en 28 años, hasta el próximo sábado, que lo hará en el Concierto de Santa Cecilia de la Banda de la Esperanza de Córdoba.