Acabo de leer la entrevista que le han hecho al nuevo director de la banda de la cruz roja... No me llega la camisa al cuerpo
Dice cosas como:
"Por todo ello, cuando intento hacer algo, me lo pienso mucho, pasan meses desde que la idea está en mi cabeza a la plasmación por escrito… el resultado tiene que ser original y no una burda copia. Pero este trabajo se queda en la satisfacción personal, ya que el público demanda copias de un esquema que ya tienen en la cabeza y que no interesa cambiar".
o
"Por un lado, el oyente está acostumbrado a un esquema ya prefijado de marcha musical (lo recordaré brevemente: Introducción-Tema-Fuerte de metales-Tema-Trío) con una serie de matizaciones menores. Este esquema es el que gusta al público en general por varias razones, en primer lugar porque posee melodías muy pegadizas y en segundo por su estructura prefijada hace muy comprensible la propuesta dada. Naturalmente que lo se demanda a grandes cantidades no tiene porqué ser de calidad musical, es más, suele no tenerla.
Salen tantas marchas cada año, porque el supuesto compositor no hace más que “copiar” la marcha de un modelo que ya está hecho (estructura general, estructura de la melodía, tipo de acompañamiento, tonalidades, instrumentación y un largo etc.). Sólo tiene que imaginarse dos o tres motivos musicales para rellenar todo el esqueleto. He llegado a pensar muchas veces y totalmente en serio (no es una exageración) que se podría hacer un programa de ordenador donde uno le mete los dos o tres motivos (cada uno de ellos de 5 a 10 notas musicales aproximadamente) y saldría con un botón toda la marcha ya terminada.
En los últimos tiempos es aún más preocupante el asunto, porque la estructura de moda es aún más simple (suele ser ahora la moda el tema con variaciones, osea, un solo tema presentado con diversos instrumentos y acompañamiento), la calidad musical empeora aún mucho más. Es más, es ya habitual que a una persona (puede que no sepa lo que es una corchea) se le ocurra una melodía y otra haga los arreglos, la instrumentación y la armonía (y encima la pasa a partitura)… ésta música es la que gusta hoy en día, así todos somos compositores…
Cuento la anécdota, que una vez hablando con Francisco Pastor (un genial compositor de marchas procesionales), me comentó; él podía haber elegido dos caminos a la hora de componer: uno seguir los cánones preestablecidos que son los que te garantizan la popularidad y el otro, hacer “música” elaborada, con una cuidada armonía y contrapunto, con procedimientos compositivos basados en el desarrollo y no en la abusiva repetición… pero claro, este camino no le llevaría a ser popular, sino que sus marchas sólo las conocería él y poca gente más, pero la satisfacción personal era enorme para él. Yo humildemente me inclino por este segundo camino (y no me importa en absoluto) porque la satisfacción personal del trabajo bien hecho no se paga ni con popularidad ni con dinero.
Me quedaría con tres marchas: Solea, dame la mano, Mater Mea (Dorado) ¡y como no! Virgen del Valle".
Creo que tiene razón en algunas de las cosas que dice, pero ¿será capaz de aplicar esas ideas al repertorio de su banda? ¿Dejará de tocar marchas como "Coronación de la Macarena", "La Estrella Sublime" o "Virgen de la Paz" -ya que se encuadran claramente en el esquema que, en cierto modo, repudia?
Sinceramente, creo que se ha pasado un poquillo. No debemos olvidar que el esquema de marcha que "no le gusta" sería un prototipo de la forma musical de la marcha de procesión. Pensemos en la forma sonata, una estructura musical que permitió que Haydn compusiera 104 sinfonías, 41 sinfonías Mozart, incluso, las primeras sinfonías de Beethoven y Schubert seguían ese esquema. Y no solamente las sinfonías. También seguían ese esquema los cuartetos de cuerda, los tríos, las sonatas para instrumento solista y piano o las sonatas de piano solo...
Yo considero (y no solamente yo. Grandes músicos piensan lo mismo) que a pesar de ese pasado, la forma sonata aún hoy día no está muerta.
Lo mismo podemos decir de la marcha procesional. El esquema está ahí, los oyentes lo conocen y se sienten cómodos con él. Solamente hace falta HACER BUENA MÚSICA con ese esquema (lo que no es fácil. Quizá sea más difícil que con otro esquema formal diferente).
¿Que hay muchas marchas parecidas o "copiadas"? Sin duda. Pero hay excepciones, las excepciones del buen hacer de los músicos de verdad: Morales, Gámez Laserna, Ramos Castro, López Farfán... y actualmente los Barros Jódar, Hurtado, Alonso Delgado, David Gómez... incluso, Pastor Bueno en su marcha "Buen Fin" emplea este esquema.
No generalicemos. No es tan fácil inventar tres ideas musicales y "cortar y pegar". Hay que saber armonía, contrapunto, instrumentación, etc. para poder desarrollar esas ideas, aunque sea con el corsé del manido esquema (o esqueleto como también lo llama).
Completamente de acuerdo en la referencia a los "compositores" que silban una melodía a un músico para que le de forma, la instrumente y conviertan ese silbido en una marcha procesional... aunque no solamente pasa en la música procesional. De siempre hay silbadores. John Lennon o Joan Manuel Serrat son ejemplos de músicos que no saben música.
En definitiva... Miedo les debe dar a los músicos actuales ("supuestos compositores" muchos de ellos, según él) enfrentarse al juicio sumarísimo de José Ignacio Cansino.
Creo que ese no es el camino. Ataquemos lo MALO, pero no tiremos por los suelos lo BUENO, aunque siga ese esquema.
Tiempo al tiempo... Esperemos que se vea su talante en el repertorio de la Banda de la Cruz Roja. Según eso, me figuro que desaparecerán de su repertorio muchas marchas que han sido santo y seña de la banda en los últimos años (creo que no hace falta dar títulos, todos los tenemos en la cabeza).
Esperemos acontecimientos... Pero... Los Morales, Marvizón, Moreno, Gómez Valles, Barros Jódar, Hurtado, Albero, Eloy García, Alonso Delgado, de la Vega, Martos, etc. ya no pueden dormir tranquilos... Les estarán vigilando ojo avizor.