Actualidad

Crónica del reestreno de "Un Recuerdo"

Mateo Olaya Marín

6 de Diciembre de 2004


Una brisa gélida inunda las calles de la capital cordobesa. Muy cerca de la Plaza de las Tendillas, allá donde a sus espaldas el entramado urbano toma el nombre de La Compañía, la gente se agolpa en cuenta gotas, expectantes ante el evento que posteriormente tendrá lugar.

Los músicos, todos jóvenes, se arremolinan ansiosos entre sus familiares, que tampoco quieren perderse aquel concierto. En ese momento consigo acercarme a uno de los integrantes de la banda para poder intercambiar impresiones. En su cara se refleja satisfacción y sobre todo conciencia de que todos estos meses verán su fruto en la siguiente hora. Un añorado repaso a la música procesional cordobesa en la época álgida de la Municipal de Córdoba y el Regimiento de Lepanto, cuando Pedro Gámez la dirigía, sirven de preludio a un importante reestreno. Surgen muchas interrogantes que intentan introducirse en el complicado y difuso mundo de la historia de nuestras marchas cofrades.

Finalmente son las nueve de la noche y en la Iglesia del Salvador todo está dispuesto para acudir al importante reestreno de la marcha procesional "Un Recuerdo", del querido compositor cordobés Eduardo Lucena. Los organizadores del evento, la parroquia del Salvador y la Hermandad de la Inmaculada Concepción y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor Jesucristo del Santo Sepulcro y Nuestra Señora del Desconsuelo en su Soledad, toman asiento en las primeras filas. El templo se encuentra lleno y los asistentes esperan ávidos con la mirada fija sobre el majestuoso retablo del altar que se eleva portentosamente.

La banda ya se ha colocado a los pies del altar y a continuación un movimiento ascendente de la batuta de su director anuncia el comienzo sobrecogedor de la primera marcha, nada más y nada menos que "Ione". Siempre se me quedarán grabadas las primeras notas contundentes de "Ione". Desde su comienzo hasta la ansiada interpretación de "Un Recuerdo" mis emociones se iban intensificando, adquiriendo mayor grado de euforia y conduciéndome gozosamente a la audición de aquella música que se erigía como los orígenes de las marchas procesionales.

El concierto

El 15 de noviembre de 2004 pasará a la historia de nuestra excelsa música procesional, puesto que en tal día tuvo lugar en Córdoba un Concierto de Marchas Procesionales con el hito musical del reestreno de "Un Recuerdo", dentro de los actos enmarcados en la celebración del CL Aniversario de la Proclamación del Dogma de la Inmaculada Concepción.

En un alarde de buen gusto y rigor profesional, el gerente de la banda protagonista, Rafael León Ramírez, prepara un esmerado díptico del concierto, con unos comentarios alusivos a las diferentes marchas que se interpretan, en los cuales vienen reflejados características de dichas piezas y diferentes trazos históricos.

El concierto constó de dos partes. La primera era relativa a la marcha fúnebre de finales del siglo XIX, mientras que la segunda se dedicaba a la marcha fúnebre a lo largo del siglo XX. Las obras fueron las siguientes:

Primera parte

- "Ione" (Enrico Petrella, 1858)
- "Virgen del Valle" (Vicente Gómez Zarzuela, 1898)
- "Quinta Angustia" (José Font Marimont, 1895)
- "Un Recuerdo" (Eduardo Lucena y Vallejo, 1883)

Segunda parte

- "Jesús de las Penas" (Antonio Pantión, 1943)
- "Lágrimas y Desamparo" (Francisco Melguizo, 1950)
- "Mater Mea" (Ricardo Dorado, 1962)
- "Soledad Franciscana" (Abel Moreno, 1987)

Terminado el concierto el público ofreció a la banda una gran ovación. En deferencia ante tales muestras de afecto se volvió a interpretar, cómo no, "Un Recuerdo".

"Un Recuerdo"


El objeto del concierto es nada más y nada menos que reestrenar la marcha procesional "Un Recuerdo", compuesta en 1883 por D. Eduardo Lucena y Vallejo. De esta marcha se han podido encontrar las partituras de todos los instrumentos que por entonces conformaban la plantilla de la Banda Municipal de Córdoba. Estamos, pues, ante el descubrimiento de una de las marcha procesionales más antiguas de Andalucía cuyas partituras han sido halladas en su totalidad, perfectamente orquestada (guión y particelas). No obstante en Cádiz se compuso "¡Piedad!" (Eduardo López Juarranz, 1876) de la cual se encontró en un principio el guión original para piano, pero con posterioridad a la instrumentación de Manuel Abollado, realizada a partir de este guión original en 1999, se ha encontrado la instrumentación del propio Eduardo López Juarranz. Aún así hay que reseñar que en la hemeroteca podemos encontrar muchos más títulos de marchas fúnebres que sonaban en las procesiones de la segunda mitad del siglo decimonónico, pero ninguna de éstas han podido fecharse concretamente ni catalogarse documentalmente.

En la portada de la partitura original, que dicho sea de paso fue rescatada por Rafael León Ramírez en la pasada cuaresma, puede leerse perfectamente la dedicatoria de esta pieza: "Al Excmo. Ayuntamiento. Marcha fúnebre "Un Recuerdo". Escrita expresamente para la procesión oficial del Viernes Santo del año 1883". Esta procesión se trata de la única que en esa época acontecía en la Semana Santa cordobesa, la procesión del Santo Entierro, cuya hermandad, tras más de un siglo, ha tenido la oportunidad de volver a rememorar una música que en tiempos pretéritos ornaba el cortejo penitencial.

En sus seis minutos de duración aproximada, "Un Recuerdo" destila un marcado romanticismo, recordando a las obras que eran cultivadas por célebres maestros y conjugando la seriedad con un carácter dulce que para nada pretende inmiscuir al oyente en un ambiente fúnebre y de profuso patetismo. En este sentido vemos ciertas similitudes con otras marchas decimonónicas, como "El Señor de Pasión" (Ramón González, 1897), "La Pobre Carmen" (Eduardo López Juarranz) o la referida "¡Piedad!" (Eduardo López Juarranz, 1876) Sin duda una música de exquisita elegancia.

El esquema de la marcha se repite en otras composiciones coetáneas: introducción, primer tema, solo de bajos y trío.

La introducción, en fa menor, consta de ocho compases. Los dos primeros compases se desarrollan en registro grave y piano, solamente protagonizados por los clarinetes segundos, clarinetes terceros, saxos, bombardinos y tuba. Progresivamente se va incorporando toda la banda manteniendo siempre el piano que en el inicio reinaba.

Antes de pasar al primer tema los metales bajos ya han iniciado el ritmo de marcha para proceder a la gestación de éste, que se divide a su vez en dos frases de 8 compases cada una. Cada frase se repite y en ella las maderas ejercen la melodía que se traza con una dulzura exuberante. Siempre en piano se ejecutan algunas formas que confieren incisión y recurrencia, manteniendo viva la tensión musical.

Después se pasa a un segundo tema en tutti fuerte donde se materializan diferentes llamadas de los metales, sin llegar a ser el típico fuerte de bajos. Este solo de bajos comprende los siguientes veinticuatro compases, donde en ocasiones se suceden pasajes en piano del grupo de las maderas pero siempre encauzando la música unos portentosos metales bajos en fortísimo.

El trío, de dieciséis compases, está escrito en si bemol menor. Nuevamente las maderas dibujan la melodía y la percusión incide en la parte débil del compás haciendo el efecto de contra tiempo. Tras una repetición de este trío se produce un da capo, mediante el cual la marcha vuelve a repetirse para terminar en el compás justamente anterior al comienzo del trío final. Quisiera resaltar el efecto conclusivo de este da capo, que nos permite volver a reincidir en ese primer tema tan bello para terminar la marcha en un brillante tutti fuerte que persigue la contundencia sonora.

"Un Recuerdo" sorprende por la magnífica elaboración y maduración de un Eduardo Lucena que por entonces contaba con treinta y cuatro años. Una marcha que seguramente a partir de este concierto quedará impregnada en nuestra realidad cofrade, maravillando a todo aquél que la escuche.

Eduardo Lucena y Vallejo

Eduardo Lucena y Vallejo fue un célebre y admirado músico cordobés. Nació en 1849 y murió una triste mañana del 2 de marzo del año 1893. A tenor de los comentarios sobre el óbito, y posteriores homenajes celebrados, no cabe duda que Eduardo Lucena fue un personaje célebre en Córdoba durante la segunda mitad del siglo XIX.

Fue un gran violinista que actuaba con su sexteto en el Salón Meyerbeer de Cádiz. Pudo estudiar violín en Madrid bajo la tutela de Jesús de Monasterio y contactar con importantes figuras musicales del momento.

A su gran labor como compositor e intérprete hay que reseñar la cátedra que ocupó en la Escuela Provincial de Bellas Artes de Córdoba (precursora del actual Conservatorio) la fundación del Centro Filarmónico, que actualmente ostenta su nombre, así como su trabajo al frente de la Banda Municipal de Córdoba.

Entre sus composiciones se pueden mencionar muchas que corresponden a diversos géneros: himnos (como el dedicado a Santa Teresa de Jesús), valses (entre los cuales se encuentra "Zaida"), pasacalles, jotas, habaneras, la celebérrima "Pavana", dos sinfonías para orquesta y un sinfín de piezas más. En lo que respecta a música procesional Eduardo Lucena no sólo compuso "Un Recuerdo", sino que también se tiene constancia de otra marcha fúnebre, "La Pasión", escrita para el estreno del drama, que lleva el mismo nombre, en Córdoba. Además se sabe que compuso otras dos marchas, desconociéndose su denominación y fecha.

El día de su muerte el féretro fue trasladado al Cementerio de San Rafael con el acompañamiento musical de la Banda Municipal de Córdoba, dirigida entonces por D. Juan de la Torre Piédrola, interpretándose en su honor "La Pasión" y "Un Recuerdo".

La banda

La banda que ofreció el concierto, a la cual debemos esta gran recuperación musical, es la Banda de Música María Santísima de la Esperanza de Córdoba, de la Hermandad homónima que reside en la Parroquia de San Andrés. Esta formación se constituyó en noviembre de 2001, haciendo su presentación al público cordobés en la Iglesia de San Andrés el día de La Esperanza, 18 de diciembre, de 2002.

Su director, D. Francisco Javier León Ramírez, se encuentra realizando una magnífica labor al frente de esta impetuosa banda de música que actualmente cuenta con cuarenta y cinco componentes. La corta trayectoria de la banda no es óbice para que se preocupe por rescatar y revalorizar grandes marchas cofradieras, algo que se constituye, sin duda, en un ejemplo a seguir por muchas otras bandas de nuestra geografía. Prueba de ello es la inclusión en su repertorio de piezas como "Ntra. Sra. de la Esperanza" de Luis Bedmar, "Lágrimas y Desamparo" de Francisco Melguizo o "Coronado de Espinas" de Joaquín Reyes Cabrera, amén de la ya mencionada "Un Recuerdo".

También intervino en el XXII Certamen de Bandas de Música de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, así como en el acto de inauguración del monumento al insigne imaginero cordobés Juan de Mesa, que tuvo lugar el pasado Viernes de Dolores. Precisamente en ese evento quería reestrenarse "Un Recuerdo", pero las inclemencias meteorológicas lo impidieron, teniendo que postergarse la ocasión para mejor momento. Finalmente el sueño de esta banda, que es también el de todos los cofrades admiradores de la música procesional, pudo hacerse realidad.

Desde estas líneas quisiera dar mi más sincera enhorabuena al director de la banda, a su gerente, a todos y cada uno de los músicos y a la hermandad que la auspicia. Animarles para que sigan esforzándose en recuperar nuestro patrimonio musical. Que este espíritu historicista siempre esté presente en su deseada larga y exitosa trayectoria.

Bibliografía y documentación

- MORENO CALDERÓN, J. Miguel, "Música y músicos en la Córdoba contemporánea". Publicaciones CAJASUR, 1999.

- Díptico del Concierto de Marchas Procesionales celebrado el 15-11-04 en Córdoba, donde tuvo lugar el reestreno de "Un Recuerdo".

- Partituras.

* Agradecemos a Sones de Fe la cesión de la grabación de la marcha.
UN RECUERDO (1883) Eduardo Lucena Vallejo
Esperanza de Córdoba
Iglesia del Salvador y Santo Domingo de Silos (Córdoba). 15 de Noviembre de 2004.
Recuperación Histórica

 Copyright © Patrimonio Musical 2004-2024

Reservados todos los derechos. Queda prohibida la reproducción, distribución, comunicación pública y utilización, total o parcial, 

de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización.